El gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro y la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) adoptaron esta sábado una declaración conjunta donde se comprometen a “convivir en paz” y aprobaron establecer una Comisión de Seguimiento para dar continuidad al diálogo que será coordinada por el exjefe del Gobierno español José
Luis Rodríguez Zapatero, uno de los mediadores.
Chavistas y opositores acordaron asimismo implementar pronto medidas para mejorar el abastecimiento de alimentos y medicinas que escasean en el país.
“El Gobierno nacional y la MUD (…) decidieron priorizar en el corto plazo la adopción de medidas orientadas al abastecimiento de medicamentos y alimentos, sobre la base de contribuir a promover su producción e importación”, dijo a los periodistas el enviado del Vaticano para el diálogo, Claudio María Celli.
Las partes decidieron también “promover el diseño y aplicación de políticas de cooperación entre los sectores público y privado para monitorear, fiscalizar y controlar los mecanismos de adquisición y distribución de insumos (materia prima) y mercancías”.
El prelado indicó que el Gobierno y la MUD se comprometieron a poner en práctica una hoja de ruta “que permita normalizar la relación constitucional entre los poderes del Estado, el respeto recíproco entre los mismos y explorar medidas de acompañamiento en el marco constitucional y de respeto”.
La oposición había dado un ultimátum a la mesa hasta el viernes para lograr acuerdos concretos o se levantarían y proseguirían con acciones de protesta contra el Gobierno.
En los acuerdos anunciados no hubo mención a demandas de la oposición sobre la reactivación de un referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro o la realización de elecciones generales.
En el campo político, se acordó “avanzar en la superación de la situación de desacato” de la Asamblea Nacional (AN, y Parlamento), de mayoría opositora, declarada así por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) luego de que la Cámara decidiera incorporar a los diputados del estado Amazonas, cuya investidura fue suspendida por el Supremo.
En ese sentido, se acordó instar a los poderes públicos competentes a actuar en la resolución del caso Amazonas en “términos perentorios”.
La mesa de diálogo acordó también que Gobierno y oposición trabajen de manera conjunta para la designación de dos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE, Poder Electoral), cuyo mandato vence en diciembre.
Notas sobre el tema
MartiNoticias
Gobierno venezolano prioriza 4 temas para diálogo con oposición
El Gobierno de Venezuela presentó cuatro consideraciones sobre los puntos que deben ser abordados en las conversaciones con sectores de la oposición, junto a acompañantes de la Unasur y el Vaticano.
En un documento entregado ante la Mesa de diálogo, la delegación gubernamental señaló como necesaria “la discusión franca” sobre el cese al intervencionismo y respeto de la soberanía nacional, así como al Estado de derecho.
Además, mencionan como otro de los temas a debatir el cese al odio y a la violencia psicológica, racial, política y criminal y a las campañas de odio; así como cese a la guerra económica y al bloqueo económico, financiero y comercial contra Venezuela.
Finalmente, el Gobierno Bolivariano insiste en el cese de las falacias y campañas de desprestigio contra Venezuela, en lo que denuncia como, “en una estrategia articulada con centros internacionales”.
“Insistimos en que deben ser los grandes temas, aquellos que conciernen a nuestras mujeres y hombres, a nuestras generaciones del futuro, que aspiran de los factores políticos que se alejen del cálculo y la retórica mezquina y promuevan acuerdos para el bien común”, reza el texto.
Además, en documento presentado también a los acompañantes internacionales hace un recuento de “la actitud y el planteamiento violento de la derecha venezolana” que ha empeorado con el Presidente Nicolás Maduro y de los esfuerzos de la Asamblea Nacional con mayoría de la derecha para derrocarlo.
Los acompañantes internacionales son el monseñor Claudio María Celli, enviado especial del Papa Francisco; Ernesto Samper, secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), y los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá).